El dolor no sabe de política,
no sabe de luchas ni de banderas.
Cuando lloramos a un hermano
no nos preguntamos donde ni con quién,
sólo lloramos a un hermano,
nos dejamos llevar por ese dolor
que nos desgarra el alma....
El dolor no sabe de política,
no se contiene ni se dirige,
no tiene segundas intenciones.
Cuando lloramos a un hermano,
sólo lloramos a un hermano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario